
Llego el día 3 de abril de 2012... Cuando empezó todo esto, yo iba solo el día 4 a general. Gracias a Dios, a mis viejos que me bancaron, a mi espíritu ahorrativo para recitales, y sobre todo a Vorterix, pude ir el día 3 a campo. Recuerdo esa semana. Una semana de tensión y nervios, más el jueves y viernes. Sumas de confusiones, dimes y diretes, ilusiones caídas y remontadas, millones de altibajos, nervios, etc. La condición era fácil, si ibas a comprar una entrada el viernes para el día 3 te regalaban otra. Lo que tenías que hacer era imprimir un código en una página de Internet y llevarlo cuando la compres, tan fácil como eso. Y como siempre, lo que parece tan fácil... para mí es casi inalcanzable. Siempre, cuando parece que lo tenes a punto de conseguir, se va... se presenta otro problema a resolver... otro inconveniente más que obstaculiza tu camino. Fue muy difícil conseguir esa entrada, desde convencer a ese amigo para que quiera participar de esto, hasta convencer a mis viejos para que juntemos la plata, pasando por los malentendidos que se producían en Vorterix, por las cosas que tuve que ingeniar para imprimir esa página, puesto que no tenía impresora, etc. Pero al fin y al cabo, pude conseguir esa maldita entrada.
Las semanas pasaron, y el día llegó. Empezando bien temprano, 7 y media arriba para bañarme y prepararme. Nos fuimos 9 y media. Llegamos alrededor de las 11, 11 y algo. La cola no era larga, 50 personas más o menos. Allí, lo vi pasar a Oberto, un capo. Y también al Panza, con la hermosa remera de Vorterix, mochila y auriculares enganchado a la radio seguro. Luego, varias veces lo vi a Martín, otro corresponsal de la V, con el handy hablando por radio, que al mismo tiempo yo estaba escuchando, algo loquísimo. Alrededor de las 3 y monedas, entramos. Fue hermoso. Correr desde la entrada atravesando todo el campo mientras Jauría tocaba la primera canción que abría el Quilmes Rock. Genial. Nos fuimos delante de todo, entre la valla del escenario y la otra. La verdad, Jauría me sorprendió, los tenía más punks y no los escuchaba mucho pero me terminaron gustando mucho. Tienen mucho Rock, incluso canciones que no me gustaban del disco, me gustaron en vivo. Mucho Rock y con eso basta para que me gusten (otra banda para agregar a la lista de las que me gustan). Luego tocó Joan Jett and The Blackhearts. Para ser sincera, no me gustaron. Lo admito, ella tiene mucho Rock, y como dijo Dave es una leyenda, es cierto. La prefiero a ella antes que a muchas minas que tratan de “rockearla”, pero... para mi gusto le falta algo... no se... no es una banda que agregaría a la lista de las que me gustan, para ser más sencilla. Además, el factor de las minas del público gritando como locas excitadas por Joan Jett, creo yo que influyeron en mi opinión. Luego, tocó Crosses. Los había escuchado antes y me habían gustado algunas cosas. Pero la verdad que me defraudaron mucho en vivo. Las canciones muy largas, muy raras, poco Rock y para cosas locas y psicodélicas ya estuvo Pink Floyd, así que no me jodas Chino Moreno (si así era como se llama) que cantas como puto... perdón, me salió el “chabon” de mi interior...
En fin, luego vino la banda que tenía ganas de ver, Band Of Horses, la verdad que me gustaron mucho. Los había escuchado y me gustaban. En vivo suenan muy bien, la voz de el cantante es muy linda, y es una banda de las que yo llamo las “bandas de estadio”, porque tienen ese sonido como Kings Of Leon (más que nada el disco “Only By The Night”), o como Biffy Clyro y el disco “One Revolution”, pero mucho más rockero. No los estoy comparando con los Kings Of Leon, es más, Band Of Horses son mucho más rockeros que ellos, pero algunas canciones como “Is There a Ghost” o “No One’s Gonna Love You” pertenecen a ese sonido particular como “Use Somebady”. Entonces y siguiendo con la formalidad, la banda de los caballos es una banda que sumaría a la lista de las que me gustan.
A todo esto, yo, en medio del campo, entre banda y banda seguía escuchando Vorterix. En un momento, Mario dijo: “bueno, haber si nos están escuchando en el campo, levanten las manos...” y yo levante los dedos en forma de V como loca, era la única entre los que estábamos de ese lado, me imagino lo que habrán pensado la gente que me rodeaba, que en un momento que no tocaba nadie una boluda levanto la mano en forma de V y sonreía de forma estúpida... pero bueno, no me importo nada.
Llego el turno de MGMT, y lo único bueno era que luego venían los Foo. Que se yo... no es una banda para un festival que se llama “Quilmes Rock”. Lo genial del recital de los MGMT, vino cuando terminaron, porque ya sabíamos que venía la banda por la cual habíamos esperado mucho.
No hay comentarios:
Publicar un comentario